Porota, una cobaya muy especial. - <center>COBAYAS CUI CUI</center>

viernes

Porota, una cobaya muy especial.

Hace ya varios días una chica contactó con nosotras por e-mail para contarnos su historia con una cobaya que para ella ha sido muy importante y especial. Le propuse el poner aquí su historia y aceptó muy gustosamente. Porota, que es así como se llamaba la cobaya, ya no está entre nosotros. Allá dónde esté que descanse en paz.

Mi nombre es Daniela y soy de Argentina. Hace unos años me regalaron una cobaya para mi cumpleaños a la que llamé ¨Porota¨ porque parecía un poroto de esos que se comen. Era muy pequeñita, así que cuando la vi la tomé entre mis manos y la acerqué a mi cara para darle un beso, luego la coloqué en mi pecho mientras la acariciaba. Grande fue mi sorpresa cuando al tiempo de que la tuviera sintiera unas pataditas en la barriguita. ¡¡Estaba embarazada!! Tuvo dos hermosos bebés que luego regalé a dos amigos. 

En el transcurso de unos cinco años fue mi compañera fiel y cariñosa. Iba conmigo en moto, en auto, en colectivo, en mis largos días de estudio... Siempre que me tuviese cerca ella se sentía segura y tranquila. Me encariñé con ella desde el primer día, pero llegué a amarla de tal forma que no se puede explicar. Estábamos conectadas. 



Cuando vivía con mi compañera de estudio, me contaba que unos minutos antes de que yo llegara a casa ella comenzaba a hacer "cui cui". Sabia cuando estaba por llegar a casa. Observaba todos mis movimientos desde su jaula y con esos ojitos tan tiernos. 

Siempre que me sentía triste la ponía en mi pecho mientras me recostaba; la acariciaba, le hablaba y ella me tranquilizaba y siempre me robaba una sonrisa. Un día que estaba llorando se acercó a mi cara lentamente y lamió mis lágrimas como diciéndome "¡no llores! estoy aquí...". Después de ese episodio solía darme besitos cada vez que la agarraba para hacerle mimitos. 

Amo a los animales, de hecho estoy por convertirme en veterinaria, pero este animalito en particular, fue un ser único para mi. 


Un día partió, y fue el día mas triste de toda mi vida. Creo que nunca lloré tanto y me dolió tanto el corazón como ese día... En este momento lloro al recordarla con tanto cariño. ¿Cómo un ser tan diminuto pudo ser tan comunicativo, tan amoroso, tan maestro... y sin siquiera hablar?


Cuando me regalaron en un cumpleaños un cachorro de border collie se hicieron muy amigos. Él se dormía al lado de su jaula pegado a ella, y ella se acercaba a él como diciéndole "yo te voy a cuidar". Se querían el uno al otro. Cuando la sacaba de su jaula, el cachorro, lejos de querer comérsela, la llenaba de besitos, y ella contenta se quedaba quieta y le hacia un cui cui cui muy bajito y cariñoso. 



Simplemente creo que la inmensidad que tienen todos los animales es maravillosa, ella la tenía en su corazoncito. Marcó mi vida sin duda alguna...

Realmente me encantó el sitio web, y quería compartir mi experiencia con éstos animalitos tan especiales, para que las personas que los quieran tener sepan darles el amor y el respeto que merecen, como todo ser vivo. Estos animalitos, una vez que te ganas su corazón, no te defraudaran nunca y te harán sentir la persona más afortunada del mundo. 


Un saludo desde Argentina. Daniela. 

Agradecimientos a Daniela por dejarnos publicar su historia y mostrar sus fotografías.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Esa historia es muy bonita yo tambien tengo uno de estos animalitos pero me da miedo cargarlo siento que me muerde y el llora por que la cargue la verdad es un amor de animalito pero no se como hacer para acercarme mas a el me gustaria un dia poder llevar una relación al igual que tu con porota. El se llama queso por que es igual de simpatico que el ratoncito de thinkerbell.

Unknown dijo...

Yo tengo tres, aniceta que vino con regalito un bb cobayito hermoso aún no tiene nombre estoy buscando el justo para el y Cleto que por estos días con la llegada del bb esta medio celocito.. Los amo es increíble que un animalito tan pequeño te de tanto. Amo a mis cobayas son parte de mi familia..

Anónimo dijo...

Ayer 20 de marzo aproximadamente a la 0200 se Coyito. Una pequeña y tan grande amiga, compañera, simplemente un ser tan puro como la blancura de su pelaje. El viernes a la noche tuvo una hemorragia, uterina aparentemente, el sabado la vio un veterinario q le receto antibiotico, vitaminas y analgesico. Costo mucho q los tomase, pero evidentemente no quiso mas. Estaba muy dolorida, no se queria mover mas. Hablamos mucho la última noche, le salio una lagrima del ojo, no se si por lo mismo q tenia, x el dolor o se despedía, lo único q se es q se fue y no puedo dejar de llorarla y extranarla. Tan chiquita y un hueco an grande me dejo q solo lo lleno pensando en sus chillidos y su histeria de cuando no le gustaba lo q le ponia de comida y solo queria lechuga. Gracias al amor de mi mujer se me hace un poco mas ameno esto, pero el egoísmo de quererla tener en mis brazos me mata. Se fue con sus 6 añitos y medio y me lleno tanto pero tanto q donde este, estara alegrando todo alrededor.